Verdad o mito: ¿La tecnología nos des-humaniza?

Si lo pensamos bien, la realidad cada vez se parece más a la puesta cinematográfica de Black Mirror; una serie donde cada episodio presenta una historia diferente para hacernos cuestionar el papel y el impacto de la tecnología en la sociedad moderna.

Pero no vamos a hablar solo de la serie en sí, (aunque si no la has visto, te recomendamos que vayas a verla). Estamos aquí para cuestionar y reflexionar sobre un tema aún más amplio: ¿Ha cambiado la digitalización las reglas del juego en las interacciones humanas?

Esta y otras preguntas las iremos respondiendo a lo largo de este blog, por eso te invitamos a que te acomodes en tu asiento, prepares tus palomitas y comiences a disfrutar de este contenido.

¿A qué nos referimos con el término des-humanización?

Según Merriam Webster editorial estadounidense, define la des-humanización como “privación de cualidades humanas, personalidad o espíritu”. Esto nos lleva a cuestionar los desafíos que enfrentamos como sociedad tras perder lo único que nos diferencia del reino animal y es nuestra esencia.

En este contexto, cuando nos referimos a la pérdida de la esencia humana, es importante destacar el papel fundamental de la comunicación y el lenguaje. Fue a través de la comunicación que las civilizaciones antiguas pudieron forjar las bases de lo que conocemos hoy en día como sociedad y que paradójicamente, con la llegada de la tecnología, estamos más conectados que nunca y a la vez no.

La tecnología como elemento transversal en nuestra comunicación

En un interesante artículo de Impulso 06 explica por qué nuestra comunicación se está viendo tan afectada por la digitalización. Esto sucede porque nuestras interacciones no son genuinas como antes, sino que ocurren detrás de una pantalla, lo que las hace menos auténticas y emotivas, puesto que es más fácil ignorar las señales naturales de comunicación cuando no podemos ver las expresiones faciales de la otra persona. Aunque parezca un detalle pequeño, esto puede llevar a una falta de empatía y compasión hacia los demás.

Desafíos de la digitalización

Tenemos que reconocer los desafíos que nos plantea la digitalización y su impacto inminente en la sociedad, uno de ellos es la brecha digital.

• Desigualdad económica:

La brecha digital no solo impide que algunas personas accedan a la tecnología, sino que también profundiza las diferencias económicas al limitar las oportunidades de trabajo, educación, salud y otros aspectos clave de la vida. Esto deja en evidencia una división clara entre ricos y pobres.

Según Internet World Stats, la brecha digital afecta a más mujeres (52%) que hombres (42%) a nivel mundial. Y si profundizamos esta disparidad a regiones específicas como por ejemplo, en África, solo el 43.1% de la población está conectada, en comparación con el 88.4% en Europa y el 93.4% en América del Norte, según datos de la misma entidad de diciembre de 2021.

• Aislamiento social y soledad:

Los niveles de ansiedad y estrés han experimentado un aumento significativo en los últimos años desde la popularización de Internet, según una entrevista realizada por el portal de noticias Hola.com a la directora y psicóloga Patricia López Recio, dijo que la hiperconexión tecnológica ha generado un problema de aislamiento social: “Uno de los grandes problemas que la tecnología nos ha dado es el aislamiento social. La tecnología te conecta con aquellos que están lejos, pero también te desconecta de quienes están cerca”, explica.

¿Y ahora qué? 🤔

Como seres humanos, necesitamos interactuar y conectarnos con los demás para tener relaciones auténticas. Es importante valorar estas conexiones humanas y esforzarnos para mantener un equilibrio en nuestra salud mental. Para preservar nuestra humanidad y promover el bienestar en nuestras vidas, es crucial fomentar una educación digital consciente, cultivar la empatía y participar en actividades que fomenten las conexiones humanas. Al priorizar estas acciones, podemos contrarrestar los efectos negativos de la deshumanización y fortalecer nuestros lazos sociales, emocionales y mentales.

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Nos vemos en una próxima. 👋🏼